¿Sabéis qué es lo malo de conocer a alguien y crear una amistad? Que lentamente, sin que te des tú cuenta, empiezas a confiar en esa persona. Y si todo va bien, cada vez confías más y más. Y entonces llega ese terrible momento en que te decepciona. Y es horrible, porque no te lo esperas para nada. De alguna forma te hace daño y eso te sorprende totalmente, porque confiabas en esa persona. Nunca pensaste que podría herirte. Pero lo hace, y duele, ya lo creo. Y ese sentimiento te quema por dentro, sobretodo si ocurre más de una vez, y tu como una gran imbécil perdonas y vuelves a perdonar.
Por eso, lo mejor que puedes hacer es alejarte y mandarlo a la mierda. Es lo mejor para ti. Y no olvidar, porque si olvidas estás perdido y te volverá a pasar lo mismo hasta que aprendas.
Luego, tarde o temprano, te llegará la duda: ¿las personas cambian?
Pongamos el hecho probable de que la persona se disculpe, que esté arrepentida.¿Lo volverá a hacer?¿Crees que cambiará para mejor?
La experiencia me dice que no, pocas veces ocurre eso, o al menos tienen que pasar años para que una persona cambie de verdad.
Así que al final, por supuesto que perdono, pero hay una parte de mí, de la confianza que había depositado, que no la recuperará nunca.
Dios, cómo te entiendo. Lo peor es cuando te has llevado tantas decepciones que lo único que haces es recelar y nunca abrirte del todo.
ResponderEliminarYo es que acabo de conocer un grupito que son... geniales. Son todos un amor, se portan increíblemente bien conmigo y disfruto mucho con ellos. Y sin embargo, hay una parte de mí que está esperando para decirme "¿Ves como al final ha pasado lo de siempre?". Y sé que cuando ese momento llegue me llevaré un golpe terrible.
En fin... No esperes que la gente cambie. Si lo hacen es para peor.
He aquí la cuestión, abrirse aún a riesgo de llevarte un golpe o cerrarse en banda para prevenirlo. Sin embargo, creo firmemente que cerrarse no sirve de nada, porque podrías estarte perdiendo una gran oportunidad de conocer gente fantástica. Es cierto que te arriesgas a llevarte luego una decepción si las cosas salen mal, pero... merece la pena arriesgarse, eso seguro. Yo este año he conocido también a personas geniales... y que si me hubiera quedado en casa sin confiar en nadie me lo habría perdido. No todo sale siempre a las mil maravillas, pero al menos hay que intentarlo :)
EliminarAmanda, sal de mi cabeza!
ResponderEliminarEs como dice Saskia, llega un momento en el que ya las decepciones y el daño ha sido tanto que solo esperas que pase para decir ''lo sabía, siempre igual'' pero al fin y al cabo quizás solo signifique que esa persona no estaba destinada a estar ahí o que no era el momento.
Luego ya están las personas tóxicas, las que te hacen daño y te piden perdón y te vuelven a hacer daño en un circulo vicioso del que no sales porque eres buena y los perdonas, a veces a expensas de ti misma, a esas personas ni mijita, me oyes, ni mijita, por muy buena que tú seas.
Me ha gustado mucho una frase tuya, la de que quizás una persona no estaba destinada a estar ahí o que no era el momento. Y tienes razón, porque algunas de mis amigas actuales (buenas amigas) recuerdo que cuando éramos más pequeñas no nos llevábamos... así que sí, a veces simplemente es que no es el momento adecuado.
EliminarEl problema viene con las personas tóxicas como tú bien dices... hay que aprender a apartarlas y no darles más oportunidades.¡Pero buf, qué difícil es!
A veces lo que pasa con las decepciones es que no conoces realmente como es una persona... aunque por otra parte, si es una persona en la que confiabas mucho la que te decepciona, pues por desgracia son las más daño hacen :(
ResponderEliminarYo creo que aunque pasen años, una persona no cambia... y quizás la única forma de que cambie sea la de que le pase algo que le haga aprender la lección... y aunque realmente aprenda la lección y se arrepienta por lo que hizo, pues perdonar sería lo correcto (bueno, eso si realmente se arrepiente y buscan que le perdones, porque en mi caso, las personas que más me decepcionaron y me hicieron daño, pues nunca les oí arrepentirse ni intención de buscar que les perdonase).
Sin embargo, si realmente alguien te hizo daño, lo podría volver a hacer... con lo cual no se merece otra vez la misma confianza.
Definitivamente, lo peor es cuando no te lo esperas, porque si viene de alguien con el que te llevas mal, pues vale, lo ves venir...
EliminarYo quizás no sería tan drástica, creo que las personas cambian, pero algunas más rápido que otras (sobretodo si van madurando), y otras quizás nunca, pero ésas son muy pocas. Lo importante es que se den cuenta en cada caso de que han obrado mal, para que recapaciten y se pongan en el lugar del otro, y así ser un poco mejor persona (a no ser que no tengan conciencia, claro xD).
Supongo que sí, debe doler mucho pasar por ese tipo de situaciones, y más si se repiten, así que como has dicho tú: hay que aprender para que no vuelva a suceder. Pero tal vez, a veces, también sea bueno olvidar. Creo que aunque tengamos miedo tendríamos que seguir y arriesgarnos para ver qué es lo que pasa, capaz que en una de esas encontramos a un compañero que realmente valga la pena.
ResponderEliminarCreo que tu comentario es el más esperanzador y optimista de todos, me gusta. Sí, hay que aprender, pero a veces también hay que olvidar e intentarlo de nuevo, aunque tengas un poco de miedo, porque sí que hay gente que vale la pena. Un saludo!
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