Es probable que algunos de vosotros, al leer el título de la entrada, pensarais: "¿Pero esta tía de qué va? ¿Primero dice que odia Crepúsculo, y ahora viene a hablar de Crónicas Vampíricas?! Pues bien, no, no me he vuelto loca, ni tengo doble personalidad, ni nada parecido. Para los que no sepan de lo que hablo, se trata de una saga de vampiros, cuya autora es L. J. Smith, - aunque ya años atrás hubo otra saga de vampiros con el mismo nombre, de Anne Rice - pero no he venido a hablar de los libros, que no los he leído, sino de la serie de televisión.
Por lo que he oído, no se parece en nada a los libros, pero en el buen sentido; quiero decir, que cambia muuchas cosas, pero supera tus expectativas. Yo, que no los he leído (a veces me repito como el ajo) no puedo comparar, pero sí puedo decir que me encanta, y ya estoy en la temporada 2. (Lo veo en el canal TNT, para más información).
Bueno, voy al grano: la historia trata de una chica, Elena (humana), que se enamora de...¿quién lo adivina? Un vampiro!sí, era fácil. El vampiro en cuestión es Stefan Salvatore, que es el hermano "bueno". Ahora os preguntaréis, ¿hay un hermano malo? Pues sí, en efecto, es el guapo Damon Salvatore (con este hombre no puedo ser objetiva) que tiene dudosos principios morales, vamos, que no le importa matar humanos y manipular a la gente.
Llegados a este punto, la mayoría de vosotros pensaréis que vaya una caca de la vaca de trama, porque la verdad es que no parece introducir nada nuevo. Cuando empecé a ver un capítulo de esta serie, yo iba con el mismo pensamiento que vosotros, pero según fue avanzando el capítulo cambié completamente de opinión.
No es en absoluto lo que te esperas, una pastelada amorososa (amorosa + sosa) que te aburre a los dos minutos, no! Podríamos clasificarlo así: Crepúsculo con historia de amor, y Crónicas vampíricas con acción y una pequeña dosis de terror (pero muy poca, eh! y recordad que estoy comparando). En definitiva, tiene acción, intriga, humor (casi siempre con el sarcasmo de Damon) y un poco de terror. Sin embargo, tengo que decir que la serie ha ido ganando, pues los 5 primeros capítulos no son ni la mitad de buenos que los siguientes.Nunca creí que me ocurriría, pero hay momentos en los que me quedo con la boca abierta por las cosas que ocurren: la trama da giros muuuuuuy inesperados! En fin, que cada día los capítulos están más interesantes y cada día estoy más enganchada! :)
Eso sí, hay que reconocer -¿sabíais que reconocer es un palíndromo?- que no es una serie que le guste a todo el mundo, así que si no te va el tema de los vampiros ni las series adolescentes, porque es lo que es, para qué vamos a engañarnos, no la veas porque no te gustará. Pero si cumples los dos requisitos te animo que le eches un vistazo!
