jueves, 26 de julio de 2012

La última.

¿Sabéis qué es lo malo de conocer a alguien y crear una amistad? Que lentamente, sin que te des tú cuenta, empiezas a confiar en esa persona. Y si todo va bien, cada vez confías más y más. Y entonces llega ese terrible momento en que te decepciona. Y es horrible, porque no te lo esperas para nada. De alguna forma te hace daño y eso te sorprende totalmente, porque confiabas en esa persona. Nunca pensaste que podría herirte. Pero lo hace, y duele, ya lo creo. Y ese sentimiento te quema por dentro, sobretodo si ocurre más de una vez, y tu como una gran imbécil perdonas y vuelves a perdonar.

Por eso, lo mejor que puedes hacer es alejarte y mandarlo a la mierda. Es lo mejor para ti. Y no olvidar, porque si olvidas estás perdido y te volverá a pasar lo mismo hasta que aprendas.
Luego, tarde o temprano, te llegará la duda: ¿las personas cambian?
Pongamos el hecho probable de que la persona se disculpe, que esté arrepentida.¿Lo volverá a hacer?¿Crees que cambiará para mejor?
La experiencia me dice que no, pocas veces ocurre eso, o al menos tienen que pasar años para que una persona cambie de verdad.
Así que al final, por supuesto que perdono, pero hay una parte de mí, de la confianza que había depositado, que no la recuperará nunca.

miércoles, 4 de julio de 2012

La alarma misteriosa y cosas de espías


Hoy he confirmado por fin que (por el momento) no estoy loca. O al menos que mi cabeza no me hacía oír alarmas imaginarias a horas intempestivas de la mañana.
Porque sí, amigos, sí. Llevaba unos cuantos días escuchando una maldita alarma que me despertaba a las 7:48 y, para alguien como yo que se levanta a las once y media, es el tipo de cosa que te cabrea un poquito.

El problema que hizo que tardara tanto en descubrirla viene de que se oía muy lejana, duraba muy poco, y, algunos días, incluso no la oía y no me despertaba a esa hora. Con lo cual:
-El primer día que la oí, como animal de costumbres que soy, no le hice caso y seguí durmiendo.
-El segundo día (que no fue al día siguiente), miré la hora y vi que eran las 7.48, pero para entonces ya había parado de sonar y como yo no había programado ningún despertador pensé que lo había soñado.
-El tercero, sí que me había programado una alarma para las 9 y pensé que era esa (y no un despertador trol), pero como me quedé dormida de todas formas pues… luego me volví a despertar a las 9. ¿Y qué se me ocurrió pensar? Pues que habría sido el despertador de un vecino.
-El cuarto, cuando sonó volví a pensar que era el mío normal, y lo intenté apagar… inútilmente. Se me ocurrió mirar la hora y… voilà, la hora mágica otra vez. Ya me quedé mosqueada.
-Y el quinto día, que fue hoy, ya estaba preparada y en cuanto empezó a sonar intenté localizar rápidamente de dónde venía el sonido…
…Venía del escritorio. ¿Y qué había dentro del escritorio?
Un estuche (entre otras cosas). ¿Y dentro del estuche?
Un reloj tipo casio. De esos que tienen luz y con los que puedes programar una alarma.
Y resulta que era la alarma que tenía puesta durante la época de exámenes. Así que…
¡Misterio resuelto!

Lo sé, no hace falta que me lo digáis... mi vida es súper emocionante y llena de aventuras dignas del Equipo Tigre o de Los Cinco. Qué va, más quisiera yo que se parecieran un poco a esas. A propósito, ¿habéis leído alguno de ellos? A mí cuando era más pequeña me encantaban :) Los libros de Los Cinco eran probablemente mejores, pero lo que me gustaba del Equipo Tigre es que cada libro siempre venía con un sobre en el que había algo que te servía para resolver los casos, como un decodificador, o una tarjeta con información sobre técnicas de espías... No estoy segura pero juraría que todos esos consejos para convertirte en detective me los chapaba.
Ja! Si hasta aún conservo un "maletín de detective" que me hice a partir de una antigua caja de rotuladores. Lo pinté por fuera de negro con un ¿rayo? naranja, y dentro vacié los rotuladores (que ya estaban secos) por "utensilios de espías": polvos de talco para las huellas, celo, una mini bolsita de plástico para recoger pruebas, un lápiz enano de ikea (¿a que todo el mundo los manga?)... todo muy profesional, por supuesto.
Estoy por hacerle una foto para enseñároslo... Mmmm... ¡qué demonios! Ahí va: